Italianos procedentes del Friuli se instalaron en este apacible lugar cordobés llamado Colonia Caroya que tomó su nombre de Estancia Caroya, establecimiento rural fundado por los jesuitas en los primeros años del siglo XVII.
|
Friuli ocupa una gran parte de la región denominada Friuli Venezia Guilla en el noreste de Italia. |
Cada año se celebra una fiesta tradicional en la que no faltan turistas italianos que dicen disfrutar de un encuentro comunitario donde la camaradería es protagonista junto a las sabrosas comidas de la región.
Entre estas, el Frico friulano tiene su versión caroyense. Se trata de una una tortilla fina y crocante que se elabora con queso, cebolla y batatas.
|
Crujiente y con cremoso relleno de queso como lo hacen los friulanos, pero con el dulce sabor de las batatas en la versión de Colonia Caroya |
La polenta blanca, suave y cremosa elaborada con maíz blanco suele acompañar al frico cordobés y es otra muestra de orgullo de los habitantes de Caroya.
Pero el manjar que se lleva los aplausos más fuertes es la Roñosa. Relleno de chorizos y huevos, todo revuelto en una gran olla. El resultado, un plato para muy buenas digestiones. Su nombre se debe a lo sucia que queda la cocina cuando se lo prepara.
|
El relleno de chorizos se utiliza para preparar la Roñosa |
El vino caroyense, de larga tradición (fueron los jesuitas quienes comenzaron una próspera producción en el 1600), tomó nuevo impulso durante la inmigración friulana a fines del siglo XIX. Se destacan sus tintos elaborados con la variedad típica Frambuá: ligeros, furtales (frambuesa, frutilla), a veces con notas herbáceas y ahumadas.